miércoles, 23 de febrero de 2011

7 Meses.

...Y al escuchar el dulce tono de tu voz entre dormida al caer de la tarde, se enloquecieron mis sentidos y se puso una sonrisa en mi rostro. 

Porque sin ti, aunque puedo vivir, prefiero no hacerlo. Cuando no estás, mi voz se quiebra en sollozos silencios que me hacen extrañarte en cada suspiro. Porque cuando poco o nada se de ti, mis palabras se suicidan mientras yo camino, o duermo, o pienso, y el latido latente de mi corazón retumba mi cabeza, acrecentándola de dolor, recordándome que puedo llegar a necesitarte y que esos días llenos de tanto vacío deben desaparecer pronto para siempre.

Quiero ser tu fe, y que por ahora, no la pierdas. Quiero ser de verdad y entender de tu cuerpo la verdad mía. Quiero invadir tu alma y no salirme de ahí nunca más, nunca jamás, porque jamás nunca quiero perder la felicidad entre mis dedos cuando se entrelazan con los tuyos. Porque sin buscar mi sonrisa la encontré en ti y no la quiero perder. Porque no quiero perder ese regocijo de estar contigo abrazándote, metida entre mis venas, calentando este frío intenso con el fuego que nace cuando nos miramos.

Quiero ser tu refugio, tu elixir secreto con el que calmas tus ganas de amar. Ser tu rincón nocturno y eterno, tu pajarillo mudo, escribir en el viento y gritarle al mundo la historia de nuestro amor.

2 comentarios:

zoemua dijo...

Cuando escribes vivo cada palabra plasmada en este blog... cada vez me sorprende mas que tu mente este llena de tanta belleza... que aproveches este talento al parecer "raro" y un tanto olvidado en nuestra sociedad :D
seguire leyendote! siempre!

Daniel Ballesteros-Sánchez dijo...

Gracias Zoe!! Me regocija mucho que yo sorprenda a alguien a quien admiro como lo hago contigo, querida poeta!
un abrazo! :)