Escrito malvado. Escrito de
tinta, pasión y sangre. Quiero descarnar tus labios pacíficos, desentrañar tu
imperfecta existencia. Quiero convertirte en un problema, colgar tu camino,
invertir tu historia. Eres mi más bello poema.
Deseo salir a escuchar la
tediosa y armónica lluvia, que golpeando las paredes, el asfalto y tu rostro,
crean una melodía silenciosa. Quiero que la lluvia se apodere poco a poco
de mi mirada triste y nostálgica; que invada nuestro ser, que camine entre nuestros
pensamientos y que nos hagamos agua.
Una voz en mi conciencia,
voz dulce y punzante, me susurra un lamento, un lamento de 16 años incapaz de
admitir ciertas cosas, un lamento represo y reprimido. ¿Son mis más escondidos
pensamientos los que exigen libertad?; seguirán ocultos: son extremadamente
perversos. Un estado de éxtasis me obliga todas las noches a pasearme por mi
pasado y recordar experiencias vividas que junto con el activo de la cafeína me
pone a descubrir las efigies de las paredes, las constelaciones del techo de mí
habitación y los rostros que navegan en el barco de mi conciencia. Permanezco
en lucha con la intangibilidad de la existencia.
Practiquemos un
neo-nomadismo urbano, dejemos que los letrados perversos sigan su desastrosa
vida, tú, defiende tus intereses, olvida los míos.
La complejidad de mi alma la
encuentro en la satisfacción de la oscuridad donde reproduzco mi mundo a mi
manera; es momento de proteger los fuertes de los débiles, es momento de
que mi escritura descarada y degradada se purifique, como el agua.
Escrito malvado. Escrito de
tinta, pasión y sangre. Quiero descarnar tus labios pacíficos, desentrañar tu
imperfecta existencia. Quiero convertirte en un problema, colgar tu camino,
invertir tu historia. Eres mi más bello poema.
Deseo salir a escuchar la
tediosa y armónica lluvia, que golpeando las paredes, el asfalto y tu rostro,
crean una melodía silenciosa. Quiero que la lluvia se apodere poco a poco
de mi mirada triste y nostálgica; que invada nuestro ser, que camine entre nuestros
pensamientos y que nos hagamos agua.
Una voz en mi conciencia,
voz dulce y punzante, me susurra un lamento, un lamento de 16 años incapaz de
admitir ciertas cosas, un lamento represo y reprimido. ¿Son mis más escondidos
pensamientos los que exigen libertad?; seguirán ocultos: son extremadamente
perversos. Un estado de éxtasis me obliga todas las noches a pasearme por mi
pasado y recordar experiencias vividas que junto con el activo de la cafeína me
pone a descubrir las efigies de las paredes, las constelaciones del techo de mí
habitación y los rostros que navegan en el barco de mi conciencia. Permanezco
en lucha con la intangibilidad de la existencia.
Practiquemos un
neo-nomadismo urbano, dejemos que los letrados perversos sigan su desastrosa
vida, tú, defiende tus intereses, olvida los míos.
La complejidad de mi alma la
encuentro en la satisfacción de la oscuridad donde reproduzco mi mundo a mi
manera; es momento de proteger los fuertes de los débiles, es momento de
que mi escritura descarada y degradada se purifique, como el agua.
2 comentarios:
mi descarada escritura infunde en un abismo de inquietudes incongruentes y sus inspiraciones con cualidades aflijidas y represetaciones de una inquietud y dofoco de la cual estamos condenados a vivir a cada momento como lo el timepo a ser una realizacion perfectible o quizas no perfectible aun asi de todo pensamiento a de ser una vda de toda una vida el pensamiento incongruente a de ser asi... o no sera asi..
quizas aun asi mis honores a la descarada escritura
Anónimo!
Envíeme un fragmento de su descarada escritura, me encantaría leerlo... un abrazo!
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